NORTE HOY - La empresa Sidersa confirmó la puesta en marcha de una de las inversiones industriales más ambiciosas de los últimos años en el norte bonaerense: la construcción de una acería de última generación en San Nicolás, con una inversión proyectada de 300 millones de dólares. La decisión fue respaldada por el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI) nacional y por un esquema normativo aprobado por la Municipalidad nicoleña. Ahora, el proyecto aguarda una señal clave desde la Provincia de Buenos Aires. El acompañamiento que falta es el de la administración de Axel Kicillof, quien aún no reglamentó el Régimen Provincial de Inversiones Estratégicas (RPIE), creado por ley en noviembre de 2024 y aprobado por ambas cámaras de la Legislatura bonaerense. El beneficio sería decisivo para la construcción de la planta, tanto en términos fiscales como de previsibilidad para el desarrollo industrial a gran escala. “Contamos con el respaldo de herramientas fundamentales como el RIGI nacional y el RIGI nicoleño, que nos dan el marco de previsibilidad y estabilidad necesarias para llevar adelante inversiones de estas características. También estamos esperando la reglamentación del régimen de incentivos de la provincia de Buenos Aires”, sostuvo Hernán Spoto, presidente de Sidersa, durante el anuncio oficial realizado la semana pasada. El proyecto Sidersa+ no solo contempla una inversión de magnitud inédita, sino también la creación de miles de empleos calificados, desarrollo de proveedores, innovación tecnológica, sustitución de importaciones, exportaciones con valor agregado y políticas activas de equidad y sostenibilidad ambiental. Todos estos ejes coinciden con los criterios establecidos por la ley provincial N° 15.510, que creó el RPIE pero que sigue a la espera de su reglamentación. Desde el sector sindical también se expresó el apoyo al pedido empresarial. El diputado provincial de Unión por la Patria y referente de la UOM, Naldo Brunelli, acompañó meses atrás a Spoto en una reunión con el ministro de Producción bonaerense, Augusto Costa. Allí se plantearon los alcances y beneficios del proyecto, y la necesidad de encuadrarlo dentro del régimen provincial. Según la normativa vigente, inversiones que superen los 200 millones de dólares –como es el caso de Sidersa+– pueden acceder al máximo nivel de beneficios fiscales previstos por el régimen: estabilidad impositiva por 30 años, exenciones parciales en Ingresos Brutos, Inmobiliario y Sellos, además de incentivos ligados al empleo, tecnología y equidad de género. En este marco, la empresa y el sector productivo regional observan con atención la postura que adoptará el Ejecutivo bonaerense. Se trata de un paso fundamental para consolidar una inversión que ya cuenta con aval de Nación y de municipio, y que se perfila como motor clave del desarrollo industrial del norte bonaerense. Opinión razonada: En un escenario económico donde cada inversión de esta magnitud representa una oportunidad estratégica para el desarrollo argentino, la reglamentación del régimen provincial no debería dilatarse más. Postergar una inversión que genera trabajo, exportaciones y tecnología no solo representa una omisión política: es una oportunidad que la provincia no puede darse el lujo de perder. NORTE HOY