NORTE HOY — La clausura de la sede social y la secretaría del Club Los Andes de Villa Ramallo desató un intenso debate público luego de que el Juzgado de Faltas municipal decidiera avanzar con la medida a partir de un episodio ocurrido el pasado 2 de noviembre. Según el acta policial, durante los festejos por el triunfo del equipo ante Defensores se habrían detonado artefactos pirotécnicos frente al edificio. Sin embargo, desde la institución niegan cualquier responsabilidad y cuestionan con firmeza el accionar del Municipio de Ramallo. El presidente del club, Diego Bordi, relató que la clausura lo tomó por sorpresa. “Cuando vi la foto de las fajas no entendía nada. A mí nadie del Municipio me avisó”, expresó. Bordi remarcó además que Los Andes sostiene desde hace años una política estricta contra el uso de pirotecnia, tanto en la cancha como en cualquier evento interno. “Nunca tuvimos un problema dentro de nuestras instalaciones. Siempre señalamos que no se puede usar pirotecnia porque afecta a chicos, animales y a toda la comunidad”, aseguró. Según explicó el dirigente, la actuación policial se inició por un aviso proveniente del Centro de Monitoreo municipal, que habría alertado sobre “detonaciones en la sede”. No obstante, cuando Bordi consultó directamente con el comisario, la propia Policía habría reconocido que no constató ningún hecho dentro del edificio ni en su vereda. “No encontraron nada. No hay imágenes ni pruebas que indiquen que alguien ingresó al club o tiró una bomba desde adentro. Lo dijeron ellos mismos”, afirmó. A pesar de ello, el Juzgado de Faltas avanzó con la clausura de la sede y la secretaría. La medida no alcanzó al buffet concesionado ni al camping, donde se desarrollan las actividades deportivas. Para la dirigencia, la sanción resulta desproporcionada y carente de fundamentos sólidos. Incluso señalaron un error en el acta oficial: figura como dirección ‘Iribas y San Martín’, lo que para Bordi evidencia improvisación y debilita la validez del procedimiento. “Es muy serio actuar con errores de tipeo en una clausura. ¿Qué hubiese pasado si yo levantaba la faja? ¿Qué lugar estaba clausurado realmente?”, cuestionó. El presidente del club también apuntó contra los criterios del Municipio para sancionar. “Si la Policía vio a personas identificadas con Los Andes usando pirotecnia en la calle, ¿por qué no las detuvo? ¿Por qué paga el club por lo que hacen particulares afuera? Las reglas tienen que ser claras y aplicarse con criterio”, sostuvo. El caso generó preocupación en el ambiente deportivo local, en un contexto donde otras instituciones y comercios también fueron sancionados por episodios vinculados a pirotecnia. Para Bordi, las medidas “deben ser ejemplificadoras, pero justas”, y no trasladar responsabilidades a entidades que sostienen espacios de contención para niñas, niños y jóvenes. “Busquen a los responsables, no castiguen a un club que trabaja todos los días con cientos de pibes”, expresó. La comisión directiva presentará su descargo el próximo martes, tras el fin de semana largo, mientras crece el malestar en la comunidad.  Opinión pública: En ámbitos sociales y deportivos de Ramallo se instaló la idea de que las sanciones preventivas deben apoyarse en pruebas claras y verificables. La preocupación principal es que decisiones apresuradas afecten a instituciones que cumplen un rol social relevante, en especial en un momento donde la comunidad demanda transparencia y coherencia en cada intervención del Estado. NORTE HOY