En la noche del sábado, un grave incidente vial sacudió la tranquilidad del macrocentro de San Nicolás. El hecho ocurrió en calle Alvear al 200, donde un automóvil Fiat UNO, conducido por un joven de 26 años, colisionó violentamente contra dos vehículos estacionados. Tras un llamado al 911, personal de la Unidad de Prevención Policial Local (UPPL) se presentó en el lugar y constató el siniestro. El conductor no se encontraba solo: una joven de 19 años lo acompañaba al momento del choque. Según las primeras pericias, el Fiat UNO embistió primero a una camioneta Nissan Frontier, perteneciente a una mujer de 58 años. El impacto fue tal que la camioneta golpeó al vehículo que se hallaba delante, un Ford KA. Personal de Tránsito Municipal se hizo presente rápidamente y procedió a realizar el test de alcoholemia al conductor. El resultado fue alarmante: 1,19 gramos de alcohol por litro de sangre, una cifra muy por encima del límite permitido. Ante esta situación, el automóvil fue secuestrado y derivado al corralón municipal. En tanto, una ambulancia del SAME trasladó a la joven acompañante al Hospital San Felipe, donde fue asistida por lesiones leves. Afortunadamente, no se registraron víctimas fatales ni heridos de gravedad. La Fiscalía interviniente dispuso iniciar actuaciones bajo la carátula de lesiones culposas e infracción a la Ley 24.449, que regula el tránsito en todo el país. Este tipo de hechos pone en evidencia la necesidad urgente de reforzar los controles y generar conciencia sobre los peligros de conducir bajo los efectos del alcohol. La combinación entre irresponsabilidad y volante puede terminar en tragedia. Diario NORTE HOY Reflexión final: Este tipo de episodios no pueden reducirse a una simple infracción. Cuando una persona con casi el triple de alcohol permitido toma el control de un vehículo, no solo arriesga su vida, sino también la de terceros inocentes. Más allá de las sanciones legales, es urgente fortalecer las políticas públicas en educación vial y prevención de siniestros.