San Nicolas

Fuerte descenso del río Paraná en San Nicolás: cayó más de medio metro en apenas cuatro días

#SanNicolás | El nivel del Paraná bajó de 1,63 a 0,97 metros entre el lunes y el viernes, según Prefectura. El INA alertó que el río se mantiene en aguas medias bajas y no prevé mejoras a corto plazo.

  • 01/08/2025 • 10:48

En apenas cuatro días, el nivel del río Paraná en San Nicolás descendió de manera marcada, generando preocupación entre especialistas y actores vinculados al entorno fluvial.

La medición oficial tomada por la Prefectura Naval Argentina este viernes 1° de agosto arrojó un registro de apenas 0,97 metros, lo que representa una caída de 66 centímetros respecto al nivel registrado el lunes 28 de julio, cuando el hidrómetro ubicado en zona portuaria marcaba 1,63 metros.

Según informó el Instituto Nacional del Agua (INA), el Paraná se encuentra actualmente en un estado de aguas medias bajas, sin previsión de cambios significativos para los próximos días. El organismo explicó que, aunque se registraron lluvias leves a moderadas sobre diversas zonas de la cuenca, la situación general no ha logrado revertirse.

Las precipitaciones más destacadas se dieron sobre los aportes por la margen izquierda en el tramo Corrientes–Esquina y también sobre el sector Paraná–San Nicolás, aunque en este último caso con acumulados leves. Para los próximos siete días, el INA anticipa que podrían continuar lluvias de escasa magnitud, sobre todo en el tramo que va desde Paraná al estuario del Río de La Plata.

En el sector Corrientes–La Paz, el nivel del río se muestra relativamente estable pero en base a aguas bajas, influenciado por la erogación estable de Yacyretá y la disminución gradual del caudal del río Paraguay. Este tramo ya presenta un comportamiento oscilante, con una leve tendencia a la baja que se mantiene en el corto plazo.

Más hacia el sur, en el eje Santa Fe–Rosario, también se verificó una tendencia descendente en el nivel del agua, con registros que se ubican en el rango de aguas bajas y medias bajas. En algunas zonas, incluso se ha observado un leve repunte como efecto residual de la última crecida del estuario del Río de La Plata, aunque sin capacidad de revertir la fase actual de estiaje.

El escenario hidrológico general sigue siendo preocupante: se espera que el río Paraná mantenga niveles bajos o apenas estables durante las próximas dos semanas. Esto podría impactar en la navegación, la pesca, el abastecimiento de agua y diversas actividades económicas ligadas al río.


Reflexión final: La situación del Paraná no debe leerse solo en términos numéricos: detrás de cada descenso de nivel hay consecuencias sociales, ambientales y económicas que muchas veces se subestiman. Las autoridades y las comunidades ribereñas deben prepararse para convivir con estos ciclos prolongados de bajante, que podrían hacerse más frecuentes ante los efectos del cambio climático.

NORTE HOY